
ISBN: 978-84-1142-386-1
© Belén Sojo Elías, Elisenda García Fernández, Ana Pérez Ortega, Natalia Sanz Horcajo, Blanca Lucía Roldán Prieto, Malena López García
https://doi.org/10.58842/SOJX8567
Resumen
La ventilación mecánica no invasiva (VMNI) es un soporte ventilatorio que actúa como apoyo a la ventilación espontánea del paciente. Gracias a la presión positiva que ejerce sobre las vías respiratorias, es empleada como tratamiento en la insuficiencia respiratoria aguda, con el objetivo de mejorar el trabajo respiratorio y disminuir la disnea. Cuenta con numerosos beneficios respecto a la terapia invasiva, sin embargo, se trata de una técnica que debe aplicarse de forma precoz para evitar su fracaso, por lo que debe de ser manejada por personal capacitado.
Su éxito depende de la selección del paciente, de la interfaz, del modo ventilatorio y de los cuidados asistenciales brindados por parte del personal de Enfermería. El objetivo del trabajo es conocer el soporte ventilatorio no invasivo, así como destacar la importancia del papel de Enfermería para la monitorización y detección temprana de las posibles complicaciones que puedan comprometer la sincronía paciente-ventilador. Es por ello por lo que se han identificado los cuidados de Enfermería dirigidos al paciente adulto portador de VMNI con la finalidad de unificar criterios a la hora de establecer medidas preventivas.
Para ello se ha realizado una revisión bibliográfica de artículos indexados en las bases de datos “PubMed”, “Scopus”, “Web of Science”, “ScienceDirect” y “Cochrane Library”, obteniendo una totalidad de 25 artículos relacionados con el tema a desarrollar.
Palabras clave: Ventilación mecánica no invasiva, presión positiva, cuidados de Enfermería, asincronía, monitorización.
Introducción
Las enfermedades respiratorias agudas han experimentado un incremento del 16,6% según los últimos datos disponibles del INE, generando una gran carga en la salud y economía de los distintos países. En el 2019 supusieron el 10,4% de las defunciones totales, convirtiéndose en la tercera causa de muerte prematura en España. Más aún, durante los dos años posteriores, su incidencia ha incrementado hasta en un 15,4%.
La Ventilación Mecánica no Invasiva (VMNI) conforma una de las modalidades de soporte ventilatorio para pacientes con insuficiencia respiratoria aguda (IRA) de diferentes etiologías. El uso de dicha técnica se ha universalizado en todos los ámbitos, tanto a nivel extrahospitalario como intrahospitalario, enfatizando su aplicación en las unidades de cuidados intensivos, intermedios o urgencias. Consiste en la aplicación de presión positiva en la vía aérea del paciente, sin la necesidad de requerir intubación endotraqueal o traqueotomía, con el objetivo de mejorar el intercambio gaseoso. Es por ello por lo que su aplicación en la práctica clínica ha experimentado un aumento de forma exponencial durante los últimos 25 años, véase su prevalencia de uso en la Comunidad de Madrid pasar de 4,5/100.000 en el 2000 a 74/100,000 habitantes en el 2017. Existen diversas modalidades de VMNI, actualmente los modos limitados por presión son los más usados, tanto la modalidad CPAP (Continuos Positive Airway Pressure) como BIPAP (Bilevel Positive Airway) empleándose hasta en un 90% de los pacientes.
Por consiguiente, la introducción y exploración progresiva de la VMNI ha contribuido en evitar y/o reducir las complicaciones derivadas de la ventilación mecánica convencional, tales como los problemas derivados de la intubación (trauma en dientes o faringe, arritmias, lesión en la mucosa o barotrauma), la disminución de los mecanismos de defensa (colonización bacteriana y neumonía) o los problemas relacionados con la retirada del tubo (hemoptisis, disfunción de las cuerdas vocales y estenosis traqueal). De la misma manera, ha favorecido la reducción significativa de la tasa de mortalidad y la duración de la estancia hospitalaria en comparación con el tratamiento estándar. Es por ello por lo que hoy en día dicha terapia se ha convertido en una de las estrategias terapéuticas más utilizadas en la práctica clínica diaria, generando así un extenso volumen de investigación clínica.
Los beneficios procedentes de dicha modalidad ventilatoria residen en el aumento de la capacidad residual funcional, con el consecuente aumento del intercambio gaseoso en las unidades alveolares, lo que supone una mejora en la relación ventilación/perfusión y distensibilidad pulmonar. Dichos beneficios favorecen el descanso de la musculatura respiratoria, provocando así una disminución del consumo de oxígeno. Asimismo, mejora el trabajo respiratorio, estado funcional y calidad de vida del paciente, además de conservar funciones como el habla y la deglución.
De igual forma, numerosos estudios demuestran la eficacia de VMNI en pacientes con agravamiento de la enfermedad obstructiva crónica (EPOC) o con edema agudo pulmonar cardiogénico (EAPc) en relación con la mejora de valores gasométricos, mecánica ventilatoria y gasto cardíaco. Sin embargo, la evidencia de eficacia en otros procesos, como la exacerbación grave del asma y la insuficiencia respiratoria hipoxémica, permanece con cierto grado de controversia, respecto a su indicación, beneficios y resultados. No obstante, es importante mencionar que la VMNI no está exenta de complicaciones, siendo las lesiones cutáneas y las fugas las más frecuentes. Es por ello por lo que la correcta elección de la interfaz es el pilar fundamental de la terapia respiratoria, sumado a una adecuada monitorización y vigilancia por parte del profesional de Enfermería.
Índice
1. RESUMEN
ABSTRACT
2. INTRODUCCIÓN
3. JUSTIFICACIÓN
4. OBJETIVOS
Objetivo general
Objetivos específicos
5. METODOLOGÍA
6. DESARROLLO
Fisiología respiratoria
Oxigenoterapia vs presión positiva
Ventilación mecánica no invasiva
Cuidados de Enfermería
7. CONCLUSIONES
8. BIBLIOGRAFÍA
9. ANEXOS