ISBN 978-84-18747-62-5
© Sergio Rodríguez Calabozo
Resumen
Introducción y justificación: El alcohol es la primera causa de muerte en jóvenes. El patrón de consumo de los adolescentes españoles ha variado con el tiempo, asociándose en la actualidad al ocio nocturno. La identificación precoz de consumidores de riesgo es la piedra angular de las intervenciones preventivas. La enfermera de Atención Primaria goza de una posición privilegiada para realizar intervenciones de promoción y prevención sobre el adolescente.
Objetivos: Conocer el papel de la enfermera de Atención Primaria en la prevención del consumo de alcohol en el adolescente y sus ámbitos de actuación.
Metodología: Se realizó la búsqueda bibliográfica en las bases de datos CINALH, Cuiden, LILACS, PubMed y Science Direct entre los meses de marzo y julio de 2020. En el trabajo se incluyeron un total de 34 documentos.
Desarrollo: El inicio y mantenimiento del consumo de alcohol en la adolescencia viene determinado por varios factores de riesgo, entre los que destacan la influencia de la familia y de los pares. El consumo de alcohol trae consigo consecuencias en estructuras y órganos, así como cambios neuropsicológicos en el adolescente. Para disminuir el consumo se utilizan diferentes métodos preventivos, como el Consejo Breve o la Intervención Breve.
Conclusiones: El consumo de alcohol en adolescentes está relacionado con conductas de abuso y violencia sexual sobre la mujer. Las intervenciones llevadas a cabo por la enfermera en el entorno escolar y en dinámica de grupo son las más eficaces en la reducción del consumo de alcohol.
Palabras Clave: Consumo de alcohol en menores, Adolescente, Prevención Primaria, Enfermería, Violencia.
La adolescencia, según la Organización Mundial de la Salud (OMS)1, es el periodo de crecimiento y desarrollo humano que tiene lugar entre los 10 y los 19 años. Esta etapa comienza con la pubertad y supone la transición a la edad adulta. Esta etapa está caracterizada por la maduración física, sexual y por la vivencia de experiencias de desarrollo que implican una transición hacia la independencia social y económica, el desarrollo de la identidad y la adquisición de la capacidad de razonamiento abstracto.
Los cambios neuroconductuales y la inmadurez relativa de los sistemas cognitivos fomentan los comportamientos de riesgo y el uso de sustancias en este periodo. El adolescente no es capaz de comprender íntegramente la relación entre una conducta y sus consecuencias. La baja percepción de riesgo y el sentido de invulnerabilidad característicos de esta etapa son factores que favorecen el consumo de alcohol 2.
El contexto social tendrá una influencia determinante sobre la vulnerabilidad de los adolescentes hacia la exposición de los comportamientos de riesgo 1.
El primer contacto con el alcohol ocurre en el hogar con el ejemplo de los padres. Con la entrada al instituto se incrementa el ocio nocturno y la ingesta de alcohol pasa a ser una forma de lograr la aceptación social ante el grupo de iguales o una imitación de los modelos observados. También prevalece el carácter transgresor de las normas de los adultos. El contexto social favorece la normalización y aceptación del consumo de alcohol, permitiendo una alta disponibilidad y accesibilidad para su adquisición. La motivación para el consumo viene dada por la idea de diversión, búsqueda de sensaciones o como una ayuda para ligar 3-6.
El patrón de consumo de los adolescentes españoles ha variado con el tiempo, con una mayor vinculación al ocio. En la actualidad, el consumo de alcohol sigue los criterios del patrón nórdico, caracterizado por el consumo de cerveza y combinados durante los fines de semana. El patrón de consumo previo, o mediterráneo, se caracterizaba por el consumo moderado diario de vino. Este último patrón también ha sido desplazado por el modelo anglosajón, basado en un consumo tipo atracón o binge drinking (BD), caracterizado por ingestas excesivas y concentradas. El patrón anglosajón tiene una estrecha relación con el riesgo de intoxicación y con las consecuencias agudas sobre la salud 3,7,8.
A nivel mundial, en el año 2016 el 57% de las personas de 15 años de edad o más se declararon abstemios, definiéndose como “abstemio” a aquella persona que no ha consumido ninguna cantidad de alcohol en los últimos 12 meses. En lo referente a todas las franjas de edad, en Europa se encuentra el mayor porcentaje de bebedores actuales (59,9%), entendiéndose “bebedor actual” como la persona que haya consumido alcohol en los últimos doce meses. Esta cifra sufrió un descenso de algo más de diez puntos respecto al año 2010 (70,1%). De manera global, este consumo actual se situó en el 43%, registrando también un descenso en comparación a los años anteriores 9.
ÍNDICE
Siglas y Acrónimos
1. Resumen
2. Introducción y justificación
3. Objetivos
4. Metodología
5. Desarrollo
5.1. Factores de riesgo y factores protectores en el consumo de alcohol
5.1.1. Influencia del entorno familiar
5.1.2. Nivel Socioeconómico (NSE)
5.1.3. Influencia del grupo de iguales
5.1.4. Características propias de la adolescencia
5.1.5. Depresión y otros trastornos
5.1.6. Otros factores
5.2. Repercusiones físicas y psicológicas del consumo de alcohol
5.2.1. Repercusiones a corto plazo del BD
5.2.2. Repercusiones a largo plazo del consumo de alcohol
5.2.3. Cambios neuroanatómicos y neuropsicológicos en el adolescente
5.2.4. La violencia en el contexto del consumo de alcohol
5.3. Intervenciones enfermeras para la prevención del consumo de alcohol
5.3.1. Instrumentos para el cribado del consumo de alcohol
5.3.2. Intervenciones en la consulta de AP
5.3.3. Otros escenarios para la intervención enfermera
6. Discusión
7. Conclusiones
8. Agradecimientos
9. Bibliografía
10. Anexos