© Rosa Gutiérrez Fernández
ISBN: 978-84-18507-01-4
RESUMEN
Este proyecto tiene como finalidad mostrar las diferentes técnicas de imagen que están asociadas con el diagnóstico y seguimiento de la enfermedad de Parkinson, centrándonos principalmente en los protocolos aplicados en RM y PET, y analizando además, otros protocolos utilizados en la actualidad para el diagnóstico y seguimiento de esta enfermedad.
En el desarrollo de este trabajo, actualizaremos los conocimientos sobre la Enfermedad de Parkinson, profundizando en los procedimientos diagnósticos aplicados.
El Parkinson es una enfermedad degenerativa progresiva para la que, hoy en día, no disponemos de un tratamiento curativo. La mayoría de los fármacos utilizados para el tratamiento de la EP están orientados a reestablecer el contenido de dopamina estriatal que existe en el estriado de estos pacientes mediante la administración del precursor de la dopamina levodopa y más recientemente con el uso de agonistas dopaminérgicos. Estos tratamientos proporcionan una mejoría sintomática importante y de los parámetros de calidad de vida durante al menos 5-8 años.
La enfermedad puede tener varios estadios de gravedad. Hablamos de enfermedad avanzada cuando la terapia convencional no proporciona un control motor adecuado a los pacientes [1].
Esta enfermedad fue descubierta por James Parkinson, y tras su descubrimiento la definió como: movimiento involuntario termulante con disminución parcial de la potencia muscular, en parte, no durante la acción, y aún apoyado, con una tendencia a inclinar el tronco hacia adelante y a pasar de un paso de marcha al de correr. Tras esto, Parkinson descubrió que los primeros síntomas aparecían como una sensación de debilidad, con la propensión a temblar algunas veces de la cabeza, pero con mucha más frecuencia los brazos o las manos. Estos primeros síntomas eran el primer estadio de la enfermedad, y que se prolongaba aproximadamente unos 2 años; Transcurrido este tiempo, los síntomas comenzaban a aumentar y a extenderse de forma gradual hasta involucrar las regiones simétricas en el lado opuesto del cuerpo. Meses después, el paciente comenzaba a tener dificultades para mantener la postura erecta. Tras esto, el paciente comenzaba a tener dificultades para hablar, y por último, las heces y la orina se escapaban involuntariamente. Para decir todo esto, James Parkinson se basó en el estudio de la historia clínica de varios pacientes que tenían la enfermedad. Tras él, en el siglo XVIII Sylvius de la Böe consiguió diferenciar el temblor de acción del temblor de reposo [1].
En 1912, Lewy describe los cuerpos que hoy llevan su nombre, los cuerpos de Lewy. En 1919, Tetriakoff, examinó el cerebro de varios pacientes con Parkinson y descubrió lesiones degenerativas, destacó la reducción en el número de células pigmentadas en la sustancia negra y relacionó estos cambios con las anormalidades del tono muscular que presentaban los pacientes [1].
Melvin Yahr fue el encargado de desarrollar la escala de estadios de esta enfermedad, la cual aún se usa hoy en día [2].
ENFERMEDAD DE PARKINSON
La enfermedad de Parkinson (EP) es un trastorno neurodegenerativo, caracterizado por la pérdida progresiva de neuronas monoaminérgicas, en especial dopaminérgicas.
El Parkinson es una enfermedad crónica y progresiva que produce la degeneración del sistema nervioso central. Es un trastorno neurodegenerativo, caracterizado por la pérdida de neurotransmisores cerebrales monoaminérgicos, en particular la dopamina. Afecta a cerca del 1% de la población mayor de 60 años, aunque puede afectar a personas de otras edades.
La enfermedad de Parkinson es un tipo de trastorno del movimiento. Ocurre cuando las células nerviosas (neuronas) no producen suficiente cantidad de una sustancia química importante en el cerebro conocida como dopamina. Algunos casos son genéticos, pero la mayoría no parece darse entre miembros de una misma familia.
Los síntomas comienzan lentamente, en general, en un lado del cuerpo. Luego afectan ambos lados. Algunos son [3]:
- Temblor en las manos, los brazos, las piernas, la mandíbula y la
- Rigidez en los brazos, las piernas y el
- Lentitud de los
- Problemas de equilibrio y coordinación.
A medida que los síntomas empeoran, las personas con la enfermedad pueden tener dificultades para caminar o hacer labores simples. También pueden tener problemas como depresión, trastornos del sueño o dificultades para masticar, tragar o hablar [3]. La siguiente imagen Nº 1 está sacada de una publicación de la página web Omeda, publicada en 2017 por la redacción de Omeda. En ella se puede observar los síntomas más importantes de la enfermedad de Parkinson [26].
Índice
- Resumen
1.1 Abstract
1.2 Objetivos Generales
1.3 Objetivos Específicos
1.4 Material y Métodos
- Enfermedad de Parkinson
2.1 Neuroimagen
- Técnicas De Imagen Aplicadas A La Enfermedad de Parkinson
3.1 Resonancia Magnética Cerebral
3.2 PET Cerebral
- Técnicas aplicadas para el control de Parkinson guiadas por imagen
4.1 Estimulación Cerebral Profunda
- Conclusiones
- Glosario
- Bibliografía