
ISBN: 978-84-1142-206-2
© Natividad Rico Ríos, Antonio José Reche Martínez
Introducción
Staphylococcus aureus es una bacteria, cocos Grampositivos, que forma parte de la flora saprófita mucocutánea del hombre. Su presencia se puede definir en dos estados:
- Estado de portador: las localizaciones más comunes son nasofaringe y piel, y otras menos comunes como vagina. Algunos estudios describen que, entre el 20 y el 40% de la población está colonizada en algún momento de su vida, de los cuales el 50% son colonizaciones intermitentes alcanzando un 30% colonizaciones prolongadas. La tasa de colonización es mayor en los pacientes hospitalizados (25-45%) y en el personal sanitario (50-75%). La piel y las mucosas sirven de barrera natural frente a la invasión de S. aureus a otras localizaciones no habituales. Estas barreras pueden ser franqueadas por traumatismo o cirugía permitiendo un portal de entrada de esta bacteria en el organismo y causando infección.
- Estado de infección:
- Infección de piel y tejidos blandos: impétigo, celulitis, fascitis, polimiositis, infección de heridas quirúrgicas e implantes.
- Intravascular: endocarditis infecciosa.
- General: bacteriemia, sepsis y meningitis.
- Huesos y articulaciones: osteomielitis séptica y artritis séptica.
- Respiratorias: neumonía, empiema y sinusitis.
- Enfermedades mediadas por toxinas como el síndrome piel escaldada y shock tóxico estafilocócico.
Epidemiología
S. aureus resistente a meticilina (SARM) es uno de los principales patógenos nosocomiales por su alta frecuencia y trascendencia clínica. Además, es el microorganismo grampositivo multirresistente de mayor prevalencia en las infecciones de piel y tejidos blandos.
La existencia de cepas resistentes a meticilina se conoce desde el año 1961, cuando comenzaron a utilizarse las penicilinas semisintéticas. Durante los últimos 20 años, los brotes de infección por SARM se han encontrado asociados a hospitales como consecuencia de un mayor número de intervenciones con implantación de materiales protésicos, del mayor número de inmunodeprimidos (comorbilidades asociadas) y por las sobreinfecciones consecuencia de la amplia utilización de antimicrobianos.
De acuerdo con los datos publicados por el Centro de Control de Enfermedades (CDC), la proporción de infecciones resistentes a los antibióticos ha ido en aumento, suponiendo más de un 60% las producidas por SARM en los últimos años.
Se observa que la mayoría de las infecciones por SARM ocurren con mayor frecuencia en entornos sanitarios. El estudio de JAMA de 2007 [4], demuestra que aproximadamente el 85% de todas las infecciones invasivas por SARM están vinculadas a este entorno (H-SARM). Por el contrario, alrededor del 14% de las infecciones fueron originadas en la comunidad (CA-SARM). Las Guías Americanas de Epidemiología (SHEA) demuestran que el menor cumplimiento de las correctas normas de higiene en el personal hospitalario incrementa considerablemente la incidencia de SARM en los pacientes, planteando las medidas de preventivas para evitar la adquisición de SARM. A pesar de que existe una relación directa entre el uso de antibióticos y la adquisición de SARM, estas guías hacen caso omiso a este hecho.
Factores de riesgo
En la literatura se encuentran descritos factores de riesgo asociados al desarrollo de infección por SARM tales como la edad, estancia hospitalaria, uso continuado de antibióticos, comorbilidades (insuficiencia cardíaca, insuficiencia respiratoria, insuficiencia renal, cáncer, diabetes y diversas enfermedades que disminuyen la inmunidad del paciente), intervenciones quirúrgicas o métodos invasivos de diagnóstico y tratamiento.