ISBN 978-84-19078-94-0
© Israel Soto Martínez
Prólogo
Cada día es más habitual ver como a edades muy tempranas los niños están acostumbrados a meterse en el agua en muchas épocas del año. De manera general, la natación se ha convertido en una actividad extraescolar que prácticamente el cien por cien de nuestros alumnos ha practicado en algún momento de su vida.
Además esta actividad se está incluyendo de manera general en muchos currículos, programas educativos de centro y programaciones anuales como recurso educativo.
Ya no solo es ese recurso al alcance de escuelas privadas y concertadas, sino que la gran oferta deportiva, existente tanto en ciudades como en zonas no tan urbanas, permite que llegue a colegios públicos e incluso de forma gratuita en entornos con un nivel sociocultural y socioeconómico desfavorecido.
Esta realidad, como maestro, me ha hecho plantearme e intentar gestionar distintos tipos de recursos al alcance de los centros educativos y programar cual puede ser el mejor aprovechamiento posible de los mismos, independientemente del tipo de centro y de la edad de nuestros alumnos, desde Educación infantil hasta Educación primaria, abarcando un amplio abanico de los 3 hasta los 12 años.
Además y dependiendo de comunidades autónomas, las administraciones competentes están ofreciendo la posibilidad de acogerse a distintos planes que subvencionen en parte los costes derivados de este tipo de actividades. En la Comunidad Valenciana (Comunidad en la que soy maestro en activo) contamos con: “ ayudas a centros educativos promotores de la actividad física y el deporte” (PEAFS)
El objeto de las subvenciones es apoyar la realización de proyectos de deporte, actividad física y salud dentro y fuera de horario lectivo durante el curso escolar y que estén integrados en el proyecto educativo de centro.
Están destinadas a centros educativos públicos y privados concertados de la Comunitat Valenciana que impartan educación primaria y educación secundaria obligatoria. Muchos centros de la Comunidad Valenciana presentan anualmente su proyecto, donde exponen las actividades deportivas que pretenden desarrollar a lo largo del curso escolar, presentes en la programación general anual.
Gracias a estas medidas, colaboración de ayuntamientos y la gestión deportiva de los propios centros, se hace posible el llevar a cabo actividades tan enriquecedoras y motivadoras como incluir la natación dentro de nuestra labor educativa, pero ¿Cuánta responsabilidad de ese aprendizaje recae sobre los tutores y/o maestros especialistas de educación física?, ¿Qué grado de actuación o preparación se exige que tenga un maestro para llevar a cabo esta labor? ¿Qué sucede con centros que no tienen recursos anteriormente nombrados?, ¿Qué implicación debo mostrar como maestro?.
El presente documento, intenta dar respuesta a estas y muchas otras cuestiones de una manera clara, apostando siempre por soluciones que posibiliten siempre, dada la circunstancia que sea, el que los alumnos y el equipo docente que lo desee, pueda implementar actividades en el medio acuático con los más pequeños.
Introducción
Lo que hoy día conocemos como natación, implica mucho más que el concepto entendido como el desarrollo de un deporte al uso con un fin competitivo. Cada familia, cada alumno y cada maestro se encuentran inmersos en algún momento del año, en actividades que se desarrollan fuera de su medio más natural, en este caso en el medio acuático, estas normalmente suelen suceder en períodos estivales de vacaciones.
De manera general, se desarrollan en un entorno lúdico, ameno, donde la diversión es el denominador común, pero por desgracia nos es habitual escuchar o leer noticias de trágicos accidentes que tienen que ver con estas actividades.
¿En qué medida está en nuestra mano educar o participar en el proceso de enseñanza aprendizaje en este ámbito? Personalmente creo, como en multitud de otras facetas, que la educación es la clave o por lo menos la llave que abre distintas posibilidades de actuación.
Debemos partir de esta idea, ya que ante todo, el primer contacto de cualquier ser humano con el medio acuático es traumático y de él va a surgir la predisposición de volver a repetirlo. No olvidemos que nuestro instinto lucha en un medio desconocido por el simple hecho de sobrevivir.
Ante actividades programadas, bien secuenciadas y sobre todo que generen un clima de afecto y confianza se esperan resultados positivos y una adaptación al medio progresiva y eficaz.
Todo lo que se aleje de esta premisa reforzará lo contrario y por tanto es posible objeto de miedos, rabietas, terquedad, etc.
No hace falta destacar en demasía la dosis de paciencia, empatía y ganas que debemos poner para contrarrestar los posibles efectos negativos que se pueden dar en algunas sesiones de natación.
Vamos a analizar los distintos factores que pueden incidir en la adquisición de una idea positiva, pero antes de pasar al siguiente punto, quiero pronunciar una palabra que se va a repetir en ocasiones en el presente texto ya que la considero la premisa por excelencia y es: MOTIVACIÓN
Índice
PRÓLOGO
INTRODUCCIÓN
INICIACIÓN DE LA ACTIVIDAD ACUÁTICA
MONITORES VS MAESTROS
OBJETIVO PRINCIPAL DE LAS ACTIVIDADES DOCENTES EN EL MEDIO ACUÁTICO
DEPORTES ACUÁTICOS:
- NATACIÓN
- Estilo libre
- Estilo de espalda
- Estilo de braza
- Estilo Mariposa
- Estilos
- NATACIÓN SINCRONIZADA
- WATERPOLO
- SALTOS
- SALVAMENTO Y SOCORRISMO
EJERCICIOS ENFOCADOS AL DOMINIO DEL MEDIO ACUÁTICO
CONCLUSIÓN